miércoles, 8 de abril de 2020

El periodismo pierde toda credibilidad




Si hay algo que está dejando claro este tiempo pandémico es que el periodismo, cuando menos el español, está perdiendo toda credibilidad. Igual no es que ustedes le profesasen mucha fe democrática anteriormente pero, a día de hoy, seguramente lo poco que creyesen en los medios de comunicación o los periodistas personalmente considerados es bastante menor. Tendrán, a buen seguro, sus medios preferidos. Sus columnistas de parte a los que profesan simpatía. Sus analistas de cámara. Es indudable que por algún camino hay que informarse y se sigue haciendo, pero las máscaras de esa independencia y de ese obrar más allá de partidos se han caído y hecho añicos en estos tiempos. He estado junto a muchos de esos que salen en televisión, he charlado con ellos, he visto cómo se mueven y con quién se mueven y creo que puedo hablar con algo de propiedad. Ahora que está el periódico donde escribo todos los días parado al cambiar formatos y mejorando la conectividad, puedo reflexionar desde lo personal. Sin más intención que intentar dar una visión de la profesión periodística, de sus jefaturas y de sus miserias empresariales y personales.

La mayoría de las personas que trabajan en los medios de comunicación, esos cientos de miles de periodistas que trabajan en condiciones inhumanas (en tema de horarios), en muchas ocasiones mal pagados y siempre con la ilusión del primer día, no son los que ustedes ven en tertulias, en las ruedas de prensa gubernamentales y demás. Existe una casta de periodistas, se les puede catalogar de estrella, que entienden que sin ellos y ellas no hay control al gobierno de turno, que sin ellos y ellas no existe la “verdadera” información, que sin ellas y ellos el periodismo es solamente notas de prensa. Son esos mismos que protestaron hace poco tiempo porque sus preguntas no le eran formuladas en las ruedas de prensa al presidente del Gobierno o los demás miembros del mismo, menospreciando con ello las preguntas de otros periodistas, de otros medios (con menos recursos sí, pero que igual ofrecen más información realmente interesante. Una casta periodística que copa las mesas de tertulianos, las columnas de todólogos y el insulso periodismo espectáculo. Hasta en ocasiones acuerdan la forma en que hay que ofrecer unas declaraciones, una noticia o un suceso político. Son quienes se piensan por encima del resto de periodistas, algunos con años de carrera ofreciendo noticias en ámbitos locales o autonómicos.

Desengáñense. La mayoría de los periodistas que siguen en twitter, a los que aplauden en televisión o leen con fruición sus columnas son pura apariencia. Puro conchabeo con uno u otro partido, o facción de partido. Marcan su territorio, adoptando un encaje ideológico (unos más de Podemos, otros más del sanchismo, otros más del PSOE del antiguo testamento, otros más de PP, otros directamente neofascistas y alguno que dice ser comunista), pero en realidad no es más que la forma de participar en la política espectáculo. Es un personaje creado para sacar tajada económica y, en algún caso, llenar el propio ego. Como pasa con youtubers e influencers varios, el ensimismamiento también está dentro de la profesión periodística, pero no deja de ser mero postureo. O si prefieren una impostura. ¿Quiere esto decir que informan mal? No, informan según ese personaje que se han creado. Tienen a gente que sigue al Gobierno y al PSOE que hacen siempre que pueden una crítica y otros que siempre hacen la pelota para que les filtren información unos u otros. Cuando parece que están dando una exclusiva (da igual el partido) realmente están sirviendo a una facción u otra del partido (recuerdo en tiempos del antiguo Podemos ver a periodistas errejonistas o pablistas haciendo de correa de transmisión de un grupo u otro para ver cómo respondían las bases a tal o cual información). Por ello siempre la información de este grupo de élite periodística va direccionada, esto es, encaminada a algún fin más allá de la mera transcripción de unos hechos. Si se fijan bien, la mayoría de medios de comunicación no ofrecen información en sí sino que, tras aportar ciertos datos, siempre viene esa coletilla interesada. En mi caso, como hago análisis reconozco que, desde una posición epistemológica que no se esconde (marxista), siempre hay un componente ideológico detrás. Pero ya se sabe. Es un análisis que pretende ser de izquierdas gobierne quien gobierne y sea quien sea el que esté al frente de los partidos políticos. Eso mismo hace esta casta pero lo esconde.

Y a esos intereses particulares hay que añadir que los medios de comunicación tienen intereses económicos y, por ello, políticos. La gran mayoría de los medios de comunicación tienen servidumbres con la clase dominante de una u otra forma. Salvo raras excepciones, todos o son propiedad, mediante fondos de inversión o Sicavs, de algún potente empresario o se deben a los millones de esta o aquella empresa potente del Ibex-35. A ello añádanle los millones que entregan todos los gobiernos a diferente escala (local, autonómica o estatal) para comprobar que esa supuesta independencia no es tal. Son un cuarto poder contra algo (el socialismo) o contra alguien (en estos tiempos Pedro Sánchez y Pablo Iglesias). Ayer mismo me decían en algún chat que sólo se fiaban de El País como medio de izquierdas. Siendo Ana Botín, presidenta del Banco de Santander, quien controla el periódico ¿piensan realmente que va a hablar de algo contrario a los deseos de esa señora y de sus intereses económicos?. Ninguno de los periódicos progresistas dirá algo contrario a lo que dicte la ideología dominante. Permiten alguna columna un tanto fuera de tono para aparentar y ya. Son aparatos ideológicos de la clase dominante, lo saben y actúan en consecuencia. Son tan teatrales y espectaculares como lo es la política en sí. Mucho antifranquismo, mucho antifascismo y ya aparentar ser de izquierdas pero llega la banca y casi todos callan.

Todo eso, que está muy resumido por la necesidad de brevedad, se está viendo ahora con el coronavirus. ¿A alguien le extraña que pueda haber sido la Comunidad de Madrid la que haya filtrado las fotos de los ataúdes a El Mundo cuando todo el mundo sabe que son el periódico preferido del PP para filtrar cuestiones que dañen a sus contrincantes? A nadie porque se ha descubierto que ese medio de comunicación trabaja en favor del PP (con algún ramalazo fascista o ciudadano). En su tiempo El País era el medio elegido por el PSOE de Felipe González para filtrar cosas. Como Podemos hace con dos o tres periodistas de cámara. O como el sanchismo hace con uno o dos periodistas de cámara, que también lo hay (alguno se habrá caído de la lista por protestar más allá de lo normal). La clase dominante lo es porque controla, directa o indirectamente, los poderes en el Estado. Evidentemente son los propietarios de los medios de producción y financieros y de ahí su poder social, pero a eso añaden medios de comunicación, ciertos ámbitos de la administración pública, ciertos dirigentes políticos (cuando no la mayoría), ya que sólo así se aseguran la reproducción de las relaciones sociales en su favor. En ese esquema de dominio, los periodistas y los medios son clave y el coronavirus ha mostrado que, al final, todos toman partido… la mayoría por la derecha.

Decálogo contra los bulos de la derecha




La policía ha encontrado más de un millón y medio de cuentas falsas mediante las que se están trasladando bulos y mentiras al grueso de la población. Incluso la aplicación de mensajería instantánea Whatsapp ha cambiado su protocolo para compartir información e implementará un veto para que no se pueda compartir información (mediante el botón dispuesto para ello) a más de un canal. Es un problema esta extensión de bulos en un momento crítico pues ello puede provocar una percepción colectiva errónea, o cuando menos muy alejada de lo que en realidad ocurre. A ello hay que sumar que los propios partidos políticos, especialmente los de derechas, están dando pábulo a esto bulos y mentiras, cuando no los están generando ellos mismos. Y si, además, desde medios de comunicación, medianamente serios por decir algo, se hacen eco de los bulos y los sitúan en pleno franja horaria de más visualización, la hecatombe social se vuelve propicia para el surgimiento de los monstruos del totalitarismo.

Son estos, y no otros, los motivos por los que este decálogo puede salvar, sino vidas, sí mentes de la manipulación de derechas que se está sufriendo en España. No son una completa solución al mal del bulo y la mentira, pero igual sí pueden servir como salvaguarda para cada cual.

1°) Huir en todo momento de las noticias de medios de comunicación no habituales. Da igual que usted prefiera lo que le dicen en su periódico regional más que el de ámbito estatal. Ahí no está el problema sino en todos esos medios que son algo+digital o confidenciales diversos. O con nombres no propios para un periódico digamos que serio. Todos esos medios son los que crean y lanzan los bulos. Ni Mediterráneo Digital, ni Moncloa.como, ni nada por el estilo.

2°) Evitar leer o aceptar artículos de medios de derechas. No son de fiar porque manipulan en estos momentos los datos y la realidad para sus espurios fines. Peligrosos habituales como OK Diario deben evitarse, como pasa con Periodista Digital, el Confidencial Digital, Es Diario o Libertad Digital. A esos hay que sumar en estos tiempos a ABC, El Español, Vozpopuli, La Razón, El Independiente, El País y, especialmente, El Mundo. Súmenles los medios nacionalistas y así algo habrán conseguido.

3°) Si tiene algún agregador de noticias, ese mecanismo mediante el cual le envían las noticias más relevantes, desconéctelo. En estos momentos, en realidad casi siempre, son los mecanismos más habituales para la distribución de bulos y artículos llenos de mentiras.

4°) La mayoría de mensajes de audio suelen ser mentira y no hay posibilidad de verificarlos. Lo mismo sucede con los vídeos donde no se ven caras o muestran hechos que se califican de forma negativa. Ni caso a este tipo de mensajes y aprovechen para señalar a quien se lo mande.

5°) Cualquier mensaje o artículo que vaya acompañado de epítetos como “escandaloso”, “vergüenza”, “traidores”, “gobierno… lo que sea malo” no son más que bulos y falsedades. Hay que obviarlos.

6°) Evitar ver el Programa de Ana Rosa o Espejo Público porque ha quedado demostrado que están transmitiendo bulos y mentiras. En el primero, por ejemplo, las dos UVI móviles que jamás han estado en la casa de Pablo Iglesias, o la falsa empresa que fabrica test rápidos, que ni fabrican, ni son rápidos.

7°) No entre en discusión jamás con alguien de extrema derecha y si le aparece en su muro de Facebook o twitter bloqueo sin pestañear. Si discute el logaritmo provoca que su mensaje se extienda más y lo vean más personas.

8°) Todo mensaje que vaya acompañado de algún hagstag de los que usa la ultraderecha es mentira siempre.

9°) No confíe tampoco en los mensajes de cargos públicos de PP, Vox o Ciudadanos, siempre incluyen manipulación o extienden bulos.

10°) Si todo lo anterior le parece poco, lo mejor que puede hacer es coger un libro, ver cine, llamar a un amigo/a o intentar desconectar aprovechando el confinamiento. Porque para frenar los bulos no hay nada mejor que la cultura y saber que si de normal nos la intentan colar todos, en estos tiempos con un Gobierno de izquierdas la derecha triplica los esfuerzos por engañarnos.

lunes, 6 de noviembre de 2017

Dialéctica negativa en el PSOE




No entiendo nada (y lo entiendo todo) de lo que está pasando en el PSOE últimamente. Veo a aquellos mismos a los que vi hace más de un año gritando "No es No" o "Traidores", a los mismos que huían de un Comité Federal, prometiendo no volver, a gente de las bases del PSOE rebelarse contra el propio Pedro Sánchez. Es cierto que mi anterior entrada del blog era que las bases acabarían con el actual secretario general del PSOE, pero esperaba que lo hiciesen por otros motivos y en otra ocasión, en otro momento de la historia. Pero no. Gentes que apoyaron hasta la extenuación a Sánchez, ahora le exigen que haga lo que ellos y ellas quieren. Porque eso es ser de izquierdas y conjuga con el lema que presiden Ferraz "Somos la izquierda".

Piden mediante carta, que hacen pública en los medios de comunicación y en las redes sociales, al secretario general y su Ejecutiva para que reconsideren su actitud respecto a lo que viene sucediendo en Cataluña. Lo primero que solicitan es que el PSOE (y su socio el PSC, evidentemente) hagan el esfuerzo por establecer un diálogo político que supere la crisis del Estado y aminore la tensión social ("en nuestra sociedad" afirman, como si en Madrid estuviese la gente pegándose por las calles, en vez de estar hasta los mismísimos del tema catalán). Perplejos y con malestar se hayan los firmantes  de la misiva. Analizaré, desde el cariño que guardo a algunas de las personas firmantes, lo que piden, intentando desentrañar lo que puede haber de verdad. Pero antes de entrar en el tema en sí decir que, paradójicamente, si algo ha hecho el PSOE ha sido dialogar en todo este tiempo como reflejan los medios de comunicación. Otra cosa es que haya sido algo silenciado por estrategia o ese diálogo no guste. Pero sobre gustos...

En el primer punto solicitan: "Propuestas concretas que
señalen una posible hoja de ruta para el mismo, recogiendo entre ellas de forma
explícita el proyecto de un Estado federal plurinacional para España". Veo bien el establecimiento de una hoja de ruta que debería ser a medio plazo por culpa de la tensión social. No se debe, como máxima política, hacer decidir a las personas bajo presión, salvo que esa presión sea en tu beneficio. Pero como los firmantes son deliberativos, creo que es buena idea bajar la tensión y realizar esa hoja de ruta. Ahora bien, sueltan lo del Estado Federal Plurinacional como si eso fuese cosa sabida y común a todas las personas. Cierto que lo pone en las resoluciones del 39° Congreso, pero de forma tan vaga que casi cabe cualquier cosa. ¿Por qué? Porque se ha dejado para un debate posterior la determinación de todo el entramado.

Sin embargo, sí se pueden decir cosas. La primera que creo que entre todos los firmantes no se pondrían de acuerdo en qué tipo de Estado sería eso federal. Todos, yo me incluyo, pueden estar de acuerdo con el fin que se desea, pero dudo que los medios a elegir fuesen los mismos. Y los medios, en este caso que hablamos de configuración estatal mucho más, determinan la solvencia del fin deseado. De los firmantes sólo conocemos, por su libro (los que lo hayamos leído), lo que propone Pérez Tapias. Y vuelvo a decir, comparto el fin, pero no la sustancia, la esencia, el en sí de ese Estado federal. Básicamente porque da a entender, en cierto modo, lo que constituiría ese estado federal serían estados-nación pequeñitos. Habla de Kymlicka para superar esa posibilidad, pero al negar la nación española (rebajar sus perfiles como nación), para incluir otras naciones, reafirma el aspecto fuertes de las demás. ¿Por qué negar que en Cataluña (o Euskadi, Baleares, Valencia, Galicia o Ceuta) hay personas que se sienten españolas con todo lo que ello implique? Es más, aquellos y aquellas que no están en un territorio nacionalista ¿por qué van a tener que ver como disuelven su sentido de pertenencia? Se equivocan al querer dotar de plurinacionalidad a España mediante la negación de la "nación España". ¿Por qué transformar la nación España? ¿Qué raro subjetivismo hay detrás de ello? Si el federalismo es "unidad en la diversidad", la nación España tiene su cabida. La ciudadanía española, que es lo republicano, no tiene por qué coincidir con la nación española.

Lo federal también incluye otro tipo de aspectos sobre la soberanía, que parece que se quita al pueblo en algunas ocasiones, pero se le da carácter de nacional en otras. Y así con una serie de cuestiones que son sumamente debatibles y no están prefiguradas de antemano al decir federal y plurinacional. Aspectos sustanciales que transforman la arquitectura federal sin duda, y en especial, el hecho de ser una monarquía federal... pero no hay espacio para ese debate general de ideas.

Segundo punto: "Reconocer la insuficiencia de la actuación del PSOE al
desechar la posibilidad de un referéndum legal pactado en Catalunya sobre sus
posibles modo de inserción o de relación con el Estado español". Todo ello porque lo apoya un 80% de los encuestados. ¿En qué momento ha desechado el PSOE de Pedro Sánchez un referéndum? Que se sepa no está en la resolución política del Congreso Federal, ergo no hay mandato de las bases en ese sentido. Hasta este fin de semana no ha quedado configurado el Comité Federal, por lo que no ha habido posibilidad de consulta. Aunque alguno de los firmantes lo ha pedido en las redes sociales, saltándose con ello los mínimos democráticos del propio partido. Bien es cierto, que esa cuestión quedó cerrada hace un tiempo, pero hasta el momento Sánchez y su equipo (donde hay muchas personas que defienden ese referéndum) no han podido decir ni mu. Criticar a alguien que sigue los procedimientos democráticos porque no se los salta es cuando menos paradójico.

Ahora bien ¿qué referéndum apoyan los firmantes? Seguramente entre ellos no se pondrían de acuerdo. Muchos y muchas querrían un referéndum de autodeterminación para decidir si sí o si no permanece Cataluña. Pero otros no piensan así. Es más, el redactor de la carta quiere un referéndum donde se exprese el derecho a decidir, que significa según expone en sus textos varios, decidir si se van o si se quedan, pero sin tener carácter de autodeterminación. El derecho de autodeterminación vendría después. En otro referéndum. Entonces para que los catalanes pudiesen decidir habría que proporcionarles una alternativa factible, no una ilusión en el tiempo. ¿Dónde esta a día de hoy esa alternativa factible? No la hay. Hasta que la Comisión sobre el Modelo Territorial que ha impulsado el PSOE (y a la que no se han adherido ni Podemos, ni los grupos nacionalistas) provoque ese debate y pueda sacar unas conclusiones reales y factibles (incluso, que no hay factibilidad alguna con PP y Ciudadanos enrocados en su visión decimonónica del Estado español) ¿para qué poner en un aprieto al secretario general y su ejecutiva? ¿Qué alternativa real presentar?

Punto tres: "Es de todo punto necesario hacer una revisión crítica de la interpretación y aplicación que se han hecho del artículo 155 de la CE, de manera que se haga patente que el PSOE está comprometido con la defensa de la legalidad sin merma alguna de la calidad democrática de nuestro sistema político, lo que exige marcar distancias respecto a los modos autoritarios del gobierno del PP". Difícilmente se puede hacer revisión crítica de algo que nunca había acontecido, de un artículo sin desarrollo y donde los propios juristas no se ponen de acuerdo. ¿Qué querían los firmantes? Lo primero que el PSOE no se juntase con el PP. La verdad es que llegando hasta aquí ya no haría falta más análisis. Lo que les encorajina no es que se aplique el 155, sino que se hace de la mano del PP. Pues como a la mayoría de las personas del PSOE. Pero ¿cómo hacer con un grupo de políticos que proclaman, saltándose las leyes la república catalana? Quitarles del poder y convocar elecciones parece lo más racional. Y esto no es ser autoritario.

El PP tiene en su ser una deriva autoritaria porque, al fin y al cabo, son hijos e hijas de la dictadura. Es cierto y de vez en cuando enseñan la patita. Pero me gustaría que en la misiva se indicasen cuáles son los modos autoritarios, más que nada porque poco o nada puedo debatir o criticar si no sé sobre qué hablan. ¿Los palos el día 1 de octubre?, ¿la prisión de los Jordis?, ¿la prisión del ex-Govern?

Punto Cuarto: "Es por ello que, sin merma del respeto que merece nuestro ordenamiento legal, ha de plantearse que las personas imputadas no tengan que estar necesariamente en la situación de prisión preventiva incondicional".  Porque los delitos que se les acusan están cogidos al pelo y zurcidos. En parte tienen toda la razón, pero es paradójico que por el buenismo de algún diputado del PSOE en el pasado (Diego López Garrido) la rebelión tenga que ser violenta para ser delito. Así que proclamar una república o una secesión (sea quien sea) no es causa penal. Salvo que la violencia se pueda considerar desde varios aspectos y no sólo física o personal. Si esto pasase en Alemania y se encarcelase a los "rebeldes", seguramente nadie diría nada. Salvo los buenistas. Es cierto que las medidas podían haber sido otras y es desproporcionada la prisión sin fianza, pero lo que escriben se podría aplicar a Ignacio González (que está imputado y en la cárcel sin fianza). Y la ley debe ser igual para todos los penados.

Quinto punto:"Es preciso que el PSOE, junto al PSC, perfile una posición propia claramente reconocible que le permita aportar junto a otras fuerzas políticas el potencial de mediación que tantas veces se invoca, máxime cuando ella se hace más necesaria aún a la vista de lo que supone el eco internacional del conflicto de Catalunya". Debe ser que Pedro Sánchez, junto a Iceta, Montilla y otros próceres no intentaron mediar junto a Urkullu. Eso han contado los protagonistas y parece que no ha existido para algunas cabezas pensantes. Además, el PSOE y el PSC vienen explicando en las últimas fechas que piensan solventar el problema social tanto como el político. No entiendo a qué viene esta petición. ¡Ah! Por si hay un intento de formar un bloque constitucionalista, como aquel que hizo Redondo Terreros en Euskadi, lo dirán. Pues juraría haber escuchado a Iceta negar eso. Pero bueno, igual estoy equivocado.

No comparto esa carta, ni el momento de publicarla. Es de suponer que Sánchez hará caso de la misiva y se pondrá rápidamente a seguir al pie de la letra lo que en ella se dice. Y espero que el debate no sea, al final, entre iluminados, élite, aparato y demás especies, sino que sea un debate donde las bases deliberen y puedan aportar de verdad. O ¿no? Una dialéctica negativa atraviesa estos tiempos al PSOE, veremos cuál es la síntesis. Igual la vuelta a la oscuridad, o la caída en el bonapartismo. ¿Quién sabe? Pero hay cosas que no entiendo y acabo por comprenderlas totalmente.

miércoles, 10 de mayo de 2017

Si gana, a Pedro Sánchez lo acuchillarán las bases



A diferencia de César que fue asesinado por los senadores que querían parar su desmesura dictatorial, si ganase las primarias a Pedro Sánchez lo acabarían acuchillando las propias bases. Esta vez no habrá un Bruto como podía ser López o Luena, sino que la propia militancia socialista se acabará dando cuenta del cesarismo que arrastra el dirigente madrileño en su cuenta y le acabarán echando. Ahora Sánchez se encuentra en la fase totémica, como diría Sigmund Freud, de máxima mitificación de su figura. Las huestes socialistas le ven como la persona que fue expulsada por una conjura, la de los necios a sus ojos.

Da igual, en estos momentos, que se intente hacer ver que la realidad no ha sido así. Eduardo Madina en un tuit ha intentado explicar cómo fueron las cosas pero da igual. La verdad no está hoy en las primarias socialistas. Me recuerda, en cierto sentido, a lo que aconteció en el 28° Congreso del PSOE donde se mitificó el tema del marxismo, que realmente era la punta de lanza contra Felipe González y Alfonso Guerra por la falta de democracia como denunciaba Luis Gómez Llorente, y al final se causó la muerte del “padre”. De esta forma se totemizó al líder socialista y se convirtió en un ser intocable y carismático. No va a suceder lo mismo con Sánchez por carecer de discurso, de carisma y de capacidades intelectuales similares a González. Pero en estos momentos no es que haya posverdad, es que directamente las huestes sanchistas viven en la mentira. Una mentira deificada a verdad por los sucesos del 1 de octubre y la aberrante abstención del PSOE.


Si existe esa mitificación o totemización de Sánchez ¿por qué mantengo que será aniquilado por sus propias huestes? Dos son los factores que he podido observar. El propio movimiento de las bases socialistas y la actuación del propio Sánchez frente a ellas. Pedro Sánchez no crea ni apoya el movimiento del No es No. Surge de las propias bases socialistas no por Sánchez sino por dar el gobierno al PP. Para un socialista español existe un límite ético y político que marca una línea roja. Dar el gobierno al PP, y más a este partido conservador corrupto y dictatorial (como se demuestra en el control de todas las estructuras del Estado), es algo que no es cabe en la cabeza de ningún socialista de base. Tampoco lo fue para quienes lo propugnaban pero se movían en la razón instrumental, no en el plano emotivo.

A ese movimiento que hacía florecer la lucha de las bases socialistas se fueron acoplando personas de muy diversa procedencia dentro del partido. Los diputados del No eran reclamados por todo el país para que diesen charlas, el movimiento recogía firmas (que cayeron en manos del oscuro aparato de Sánchez), se presentaban denuncias, incluso los trotskistas aparecían con su entrismo en escena. Sánchez había renunciado, dejando tirados a sus compañeros y compañeras de hemiciclo, y llorado sus penas en televisión. Había abandonado el barco junto a las ratas (los que pasaron de apoyar el No a la abstención por salvar las hipotecas). Pero mandó a sus personas de confianza, a sus nuevas personas de confianza habría que decir porque cambia de equipo como de calzoncillos, para mover ese movimiento espontáneo a su completo favor y que le acabasen reclamando con adoración.

Es en ese momento cuando comienza la perversión del movimiento de lucha espontánea que había surgido. Poco a poco las personas que encabezaron las plataformas de toda España son sustituidas por el aparato de Sánchez en cada provincia. Aparato compuesto de neófitos del sanchismo, de correveidiles y algunos amargados y amargadas. Personas que se partieron la cara en el propio hemiciclo, como Susana Sumelzo, es dejada a su suerte frente a Lambán, en favor de algunos abstencionistas porque Sánchez sí paga traidores. Todo aquel que le aporte, en estos momentos, algo de brillo y sometimiento a su voluntad es bienvenido. Las plataformas del No es No han acabado desapareciendo en favor de la organización de una facción sanchista dentro del partido.

Incluso en el plano ideológico y organizativo Sánchez ha colocado a sus amigos. Salvo Odón Elorza, ninguno de los que estuvieron presentes el día de la presentación de su documento en Madrid se había partido la cara en los meses anteriores. No se puede dudar del voluntarismo de Tezanos o Escudero, para ellos es casi un honor que los vuelvan a llamar, pero el resto de los participantes en aquello son tan aparato como las huestes de los barones. O desean volver al aparato. ¿Qué dice democrático el documento? Que se consultará a las bases decisiones fundamentales y que se quiere elegir por listas abiertas a los miembros del Comité Federal. No veo mucha democracia. No veo que el demos socialista se acerque al cratos. Es más, todo ello supone la instauración de un sistema bonapartista y plebiscitario donde todos los mecanismos intermedios de control quedan completamente anulados. Vamos lo que pretende hacer Maduro en Venezuela y que tan poco gusta a Sánchez.

Ya se puede observar que Sánchez tiene poco apego a la democracia. Ya dijeron sus abogados que las primarias eran para tener entretenidas a las bases. Pues ahora tendrán plebiscitos donde él preguntará lo que quiera y de la forma que quiera y las bases se limitarán a votar. Ni más, ni menos. Tragarán las bases, como ya tragaron y eso que se reclaman de izquierdas, con acuerdos con Ciudadanos que serán completamente de derechas. O aceptarán coaliciones con Podemos donde el PSOE será solamente un comodín de maquillaje del líder morado con Sánchez llevado a muchos actos para dorarle la píldora. Mientras el ego de Sánchez esté lleno, le importa la democracia y el PSOE muy poco. Y de esto ya hay mucha gente de las bases y del movimiento democrático del PSOE que se están dando cuenta.

Cree Sánchez que ha logrado un nivel carismático como el de González, Comienza a verse intocable y se lo cree. Comienza a parecer mucho más Calígula que César. Pero el equivocado es él. No a mucho tardar las bases igual que se han levantado contra las baronías, de las que dependen monetariamente en muchas ocasiones, se levantarán contra la mentira democrática que es Sánchez. Ya tiene montado su aparato frente a las bases. De momento muchas personas siguen creyendo en él, pero otras muchas ya se han dado cuenta cómo es. Muchos de los que le apoyan son conscientes de que Sánchez es un medio, no el fin. Él, evidentemente, no lo ha entendido. Y muchas personas de las bases saben que algún día tendrán que acuchillarle políticamente. De momento les sirve en la consecución de un PSOE de izquierdas y democráticos, aunque saben que Sánchez ni es democrático (ya lo demostró durante su mandato), y es un liberal humanista. Saben que lo tendrán que matar simbólicamente, y saben que no dudarán ni un minuto en hacerlo. Eso sí, igual en todo este juego de máscaras, espejos y medias verdades se llevan al PSOE por delante dando un gusto enorme a PP y Podemos. Es el riesgo que asumieron las bases al sublevarse y apoyarse en Sánchez. Si lo hubiesen hecho en otros igual…

domingo, 5 de marzo de 2017

La metedura de pata de Susana Díaz


Había manifestado que las personas quieren que vuelva el PSOE, que sepa de dónde viene, a dónde va y qué es lo que quiere para España y Andalucía. Iba subiendo el calor, que no el rigor, del discurso de la dirigente socialista. En un momento dado (ver vídeo), enfervorecida recordó que el PSOE de antes era un PSOE en el “que cabía desde Paco Vázquez a Pablo Castellano”. Los investigadores de la historia del PSOE dieron un respingo y cayeron en la cuenta del patinazo de Susana Díaz.



Sin duda Pablo Castellano fue un dirigente socialista, divergente con las tesis del felipismo, y fundador de Izquierda Socialista, que convivió con González y Guerra, hasta que lo expulsaron en 1987. Había criticado la política de reconversión industrial y poco socialdemócrata de Boyer y Solchaga, había defendido el No a la OTAN en el 30 Congreso del PSOE y durante la campaña del referéndum, o criticaba la falta de democracia interna dentro de la organización.
Sin embargo, no fue hasta que denunció un posible caso de tráfico de influencias de Txiqui Benegas y Abel Matutes (sí, el que fuera ministro del PP) cuando se le expulsó sin tramitación de expediente el 20 de octubre de 1987. Por tanto, parece que no cabía Castellano en el PSOE. ¿Este es el PSOE que quiere Susana Díaz?

Pepote Rodríguez de la Borbolla defenestrado

José “Pepote” Rodríguez de la Borbolla, al que Díaz debe conocer muy bien, fue otro de los políticos defenestrados en su momento por ir por libre. Y eso que era el presidente de la Junta de Andalucía. Pepote fue, primero, desplazado de la secretaría general del PSOE-A mediante distintas maniobras de Alfonso Guerra, que puso a Carlos Sanjuán. Y, segundo, le quitaron de la Junta de Andalucía nombrando a Manuel Chaves para relevarle. El escándalo, por enfrentarse a Guerra, provocó la reunión del clan de Chamartín que dio origen a lo que luego se llamaría renovación.
Es conocida la anécdota que tuvo con Guerra. Pepote preguntó a Alfonso qué había que hacer para estar bien con él. El vicesecretario le contestó que había que situarse en la línea. Pepote inquirió de nuevo “¿Dónde está la línea?”. A lo que Guerra contestó: “La línea se mueve”. De esta forma Guerra situaba la capacidad de estar en el PSOE a su propia voluntad y deseos. A lo que quisiese la Ejecutiva Federal. ¿Este es el PSOE que desea recuperar Susana Díaz?

Otros casos a los que no dejaron vivir el PSOE

En otra parte del discurso del sábado 4 de marzo, Díaz destacó que antes en el PSOE “cabían hombres y mujeres que vivían el socialismo como les daba la gana, como querían”. Cierto, el PSOE siempre ha sido muy ácrata y, paradójicamente, muy disciplinado a la vez. Cada cual ha intentado vivir como quería el partido. Pero se podía vivir en el fondo del partido. En cuanto se ha sacado la cabeza se la han cortado.

Alonso Puerta tuvo la ocurrencia de, siendo él secretario general de Madrid, encabezar la delegación al Congreso Extraordinario de 1979. ¡Por delante de Felipe González! Éste era simplemente militante al haber renunciado. Se la guardaron y cuando denunció un posible caso de corrupción en las contratas de la basura en el Ayuntamiento de Madrid fue expulsado del PSOE. En 1981, dos años después de la ofensa, dejó de pertenecer al partido por denunciar un caso de corrupción.

José Antonio Pérez Tapias y Juan Antonio Barrio, ambos de Izquierda Socialista, fueron laminados de las listas electorales de 2012 por haber tenido la osadía de votar contra la reforma del art. 135 de la Constitución. La famosa votación donde España perdía su soberanía económica en favor de los intereses económicos europeos. Y el caso es que en Granada se solicitó que el profesor Pérez Tapias siguiese. Pero no lo aceptó el aparato. ¿Este es el PSOE que quiere Susana Díaz?

El PSC tendrá que realizar una inscripción entre sus afiliados para poder participar en las primarias del PSOE. Esto ha sido llevado a cabo por la actual Gestora del PSOE. Hasta la fecha, la militancia del PSC siempre ha podido participar en los congresos y primarias del PSOE con total libertad y en virtud al pacto que se cerró hace más de treinta años. Sin embargo, ha sido la Gestora la que ha roto relaciones con los catalanes por no seguir el voto abstencionista del Comité Federal. Por no plegarse a la voluntad de unos pocos. Al igual que sucedió con Castellano, Rodríguez de la Borbolla, Puerta o Pérez Tapias, ahora es el PSC el que no puede vivir el PSOE como le da la gana. ¿Es este el PSOE que quiere Susana Díaz?