lunes, 6 de noviembre de 2017

Dialéctica negativa en el PSOE




No entiendo nada (y lo entiendo todo) de lo que está pasando en el PSOE últimamente. Veo a aquellos mismos a los que vi hace más de un año gritando "No es No" o "Traidores", a los mismos que huían de un Comité Federal, prometiendo no volver, a gente de las bases del PSOE rebelarse contra el propio Pedro Sánchez. Es cierto que mi anterior entrada del blog era que las bases acabarían con el actual secretario general del PSOE, pero esperaba que lo hiciesen por otros motivos y en otra ocasión, en otro momento de la historia. Pero no. Gentes que apoyaron hasta la extenuación a Sánchez, ahora le exigen que haga lo que ellos y ellas quieren. Porque eso es ser de izquierdas y conjuga con el lema que presiden Ferraz "Somos la izquierda".

Piden mediante carta, que hacen pública en los medios de comunicación y en las redes sociales, al secretario general y su Ejecutiva para que reconsideren su actitud respecto a lo que viene sucediendo en Cataluña. Lo primero que solicitan es que el PSOE (y su socio el PSC, evidentemente) hagan el esfuerzo por establecer un diálogo político que supere la crisis del Estado y aminore la tensión social ("en nuestra sociedad" afirman, como si en Madrid estuviese la gente pegándose por las calles, en vez de estar hasta los mismísimos del tema catalán). Perplejos y con malestar se hayan los firmantes  de la misiva. Analizaré, desde el cariño que guardo a algunas de las personas firmantes, lo que piden, intentando desentrañar lo que puede haber de verdad. Pero antes de entrar en el tema en sí decir que, paradójicamente, si algo ha hecho el PSOE ha sido dialogar en todo este tiempo como reflejan los medios de comunicación. Otra cosa es que haya sido algo silenciado por estrategia o ese diálogo no guste. Pero sobre gustos...

En el primer punto solicitan: "Propuestas concretas que
señalen una posible hoja de ruta para el mismo, recogiendo entre ellas de forma
explícita el proyecto de un Estado federal plurinacional para España". Veo bien el establecimiento de una hoja de ruta que debería ser a medio plazo por culpa de la tensión social. No se debe, como máxima política, hacer decidir a las personas bajo presión, salvo que esa presión sea en tu beneficio. Pero como los firmantes son deliberativos, creo que es buena idea bajar la tensión y realizar esa hoja de ruta. Ahora bien, sueltan lo del Estado Federal Plurinacional como si eso fuese cosa sabida y común a todas las personas. Cierto que lo pone en las resoluciones del 39° Congreso, pero de forma tan vaga que casi cabe cualquier cosa. ¿Por qué? Porque se ha dejado para un debate posterior la determinación de todo el entramado.

Sin embargo, sí se pueden decir cosas. La primera que creo que entre todos los firmantes no se pondrían de acuerdo en qué tipo de Estado sería eso federal. Todos, yo me incluyo, pueden estar de acuerdo con el fin que se desea, pero dudo que los medios a elegir fuesen los mismos. Y los medios, en este caso que hablamos de configuración estatal mucho más, determinan la solvencia del fin deseado. De los firmantes sólo conocemos, por su libro (los que lo hayamos leído), lo que propone Pérez Tapias. Y vuelvo a decir, comparto el fin, pero no la sustancia, la esencia, el en sí de ese Estado federal. Básicamente porque da a entender, en cierto modo, lo que constituiría ese estado federal serían estados-nación pequeñitos. Habla de Kymlicka para superar esa posibilidad, pero al negar la nación española (rebajar sus perfiles como nación), para incluir otras naciones, reafirma el aspecto fuertes de las demás. ¿Por qué negar que en Cataluña (o Euskadi, Baleares, Valencia, Galicia o Ceuta) hay personas que se sienten españolas con todo lo que ello implique? Es más, aquellos y aquellas que no están en un territorio nacionalista ¿por qué van a tener que ver como disuelven su sentido de pertenencia? Se equivocan al querer dotar de plurinacionalidad a España mediante la negación de la "nación España". ¿Por qué transformar la nación España? ¿Qué raro subjetivismo hay detrás de ello? Si el federalismo es "unidad en la diversidad", la nación España tiene su cabida. La ciudadanía española, que es lo republicano, no tiene por qué coincidir con la nación española.

Lo federal también incluye otro tipo de aspectos sobre la soberanía, que parece que se quita al pueblo en algunas ocasiones, pero se le da carácter de nacional en otras. Y así con una serie de cuestiones que son sumamente debatibles y no están prefiguradas de antemano al decir federal y plurinacional. Aspectos sustanciales que transforman la arquitectura federal sin duda, y en especial, el hecho de ser una monarquía federal... pero no hay espacio para ese debate general de ideas.

Segundo punto: "Reconocer la insuficiencia de la actuación del PSOE al
desechar la posibilidad de un referéndum legal pactado en Catalunya sobre sus
posibles modo de inserción o de relación con el Estado español". Todo ello porque lo apoya un 80% de los encuestados. ¿En qué momento ha desechado el PSOE de Pedro Sánchez un referéndum? Que se sepa no está en la resolución política del Congreso Federal, ergo no hay mandato de las bases en ese sentido. Hasta este fin de semana no ha quedado configurado el Comité Federal, por lo que no ha habido posibilidad de consulta. Aunque alguno de los firmantes lo ha pedido en las redes sociales, saltándose con ello los mínimos democráticos del propio partido. Bien es cierto, que esa cuestión quedó cerrada hace un tiempo, pero hasta el momento Sánchez y su equipo (donde hay muchas personas que defienden ese referéndum) no han podido decir ni mu. Criticar a alguien que sigue los procedimientos democráticos porque no se los salta es cuando menos paradójico.

Ahora bien ¿qué referéndum apoyan los firmantes? Seguramente entre ellos no se pondrían de acuerdo. Muchos y muchas querrían un referéndum de autodeterminación para decidir si sí o si no permanece Cataluña. Pero otros no piensan así. Es más, el redactor de la carta quiere un referéndum donde se exprese el derecho a decidir, que significa según expone en sus textos varios, decidir si se van o si se quedan, pero sin tener carácter de autodeterminación. El derecho de autodeterminación vendría después. En otro referéndum. Entonces para que los catalanes pudiesen decidir habría que proporcionarles una alternativa factible, no una ilusión en el tiempo. ¿Dónde esta a día de hoy esa alternativa factible? No la hay. Hasta que la Comisión sobre el Modelo Territorial que ha impulsado el PSOE (y a la que no se han adherido ni Podemos, ni los grupos nacionalistas) provoque ese debate y pueda sacar unas conclusiones reales y factibles (incluso, que no hay factibilidad alguna con PP y Ciudadanos enrocados en su visión decimonónica del Estado español) ¿para qué poner en un aprieto al secretario general y su ejecutiva? ¿Qué alternativa real presentar?

Punto tres: "Es de todo punto necesario hacer una revisión crítica de la interpretación y aplicación que se han hecho del artículo 155 de la CE, de manera que se haga patente que el PSOE está comprometido con la defensa de la legalidad sin merma alguna de la calidad democrática de nuestro sistema político, lo que exige marcar distancias respecto a los modos autoritarios del gobierno del PP". Difícilmente se puede hacer revisión crítica de algo que nunca había acontecido, de un artículo sin desarrollo y donde los propios juristas no se ponen de acuerdo. ¿Qué querían los firmantes? Lo primero que el PSOE no se juntase con el PP. La verdad es que llegando hasta aquí ya no haría falta más análisis. Lo que les encorajina no es que se aplique el 155, sino que se hace de la mano del PP. Pues como a la mayoría de las personas del PSOE. Pero ¿cómo hacer con un grupo de políticos que proclaman, saltándose las leyes la república catalana? Quitarles del poder y convocar elecciones parece lo más racional. Y esto no es ser autoritario.

El PP tiene en su ser una deriva autoritaria porque, al fin y al cabo, son hijos e hijas de la dictadura. Es cierto y de vez en cuando enseñan la patita. Pero me gustaría que en la misiva se indicasen cuáles son los modos autoritarios, más que nada porque poco o nada puedo debatir o criticar si no sé sobre qué hablan. ¿Los palos el día 1 de octubre?, ¿la prisión de los Jordis?, ¿la prisión del ex-Govern?

Punto Cuarto: "Es por ello que, sin merma del respeto que merece nuestro ordenamiento legal, ha de plantearse que las personas imputadas no tengan que estar necesariamente en la situación de prisión preventiva incondicional".  Porque los delitos que se les acusan están cogidos al pelo y zurcidos. En parte tienen toda la razón, pero es paradójico que por el buenismo de algún diputado del PSOE en el pasado (Diego López Garrido) la rebelión tenga que ser violenta para ser delito. Así que proclamar una república o una secesión (sea quien sea) no es causa penal. Salvo que la violencia se pueda considerar desde varios aspectos y no sólo física o personal. Si esto pasase en Alemania y se encarcelase a los "rebeldes", seguramente nadie diría nada. Salvo los buenistas. Es cierto que las medidas podían haber sido otras y es desproporcionada la prisión sin fianza, pero lo que escriben se podría aplicar a Ignacio González (que está imputado y en la cárcel sin fianza). Y la ley debe ser igual para todos los penados.

Quinto punto:"Es preciso que el PSOE, junto al PSC, perfile una posición propia claramente reconocible que le permita aportar junto a otras fuerzas políticas el potencial de mediación que tantas veces se invoca, máxime cuando ella se hace más necesaria aún a la vista de lo que supone el eco internacional del conflicto de Catalunya". Debe ser que Pedro Sánchez, junto a Iceta, Montilla y otros próceres no intentaron mediar junto a Urkullu. Eso han contado los protagonistas y parece que no ha existido para algunas cabezas pensantes. Además, el PSOE y el PSC vienen explicando en las últimas fechas que piensan solventar el problema social tanto como el político. No entiendo a qué viene esta petición. ¡Ah! Por si hay un intento de formar un bloque constitucionalista, como aquel que hizo Redondo Terreros en Euskadi, lo dirán. Pues juraría haber escuchado a Iceta negar eso. Pero bueno, igual estoy equivocado.

No comparto esa carta, ni el momento de publicarla. Es de suponer que Sánchez hará caso de la misiva y se pondrá rápidamente a seguir al pie de la letra lo que en ella se dice. Y espero que el debate no sea, al final, entre iluminados, élite, aparato y demás especies, sino que sea un debate donde las bases deliberen y puedan aportar de verdad. O ¿no? Una dialéctica negativa atraviesa estos tiempos al PSOE, veremos cuál es la síntesis. Igual la vuelta a la oscuridad, o la caída en el bonapartismo. ¿Quién sabe? Pero hay cosas que no entiendo y acabo por comprenderlas totalmente.

miércoles, 10 de mayo de 2017

Si gana, a Pedro Sánchez lo acuchillarán las bases



A diferencia de César que fue asesinado por los senadores que querían parar su desmesura dictatorial, si ganase las primarias a Pedro Sánchez lo acabarían acuchillando las propias bases. Esta vez no habrá un Bruto como podía ser López o Luena, sino que la propia militancia socialista se acabará dando cuenta del cesarismo que arrastra el dirigente madrileño en su cuenta y le acabarán echando. Ahora Sánchez se encuentra en la fase totémica, como diría Sigmund Freud, de máxima mitificación de su figura. Las huestes socialistas le ven como la persona que fue expulsada por una conjura, la de los necios a sus ojos.

Da igual, en estos momentos, que se intente hacer ver que la realidad no ha sido así. Eduardo Madina en un tuit ha intentado explicar cómo fueron las cosas pero da igual. La verdad no está hoy en las primarias socialistas. Me recuerda, en cierto sentido, a lo que aconteció en el 28° Congreso del PSOE donde se mitificó el tema del marxismo, que realmente era la punta de lanza contra Felipe González y Alfonso Guerra por la falta de democracia como denunciaba Luis Gómez Llorente, y al final se causó la muerte del “padre”. De esta forma se totemizó al líder socialista y se convirtió en un ser intocable y carismático. No va a suceder lo mismo con Sánchez por carecer de discurso, de carisma y de capacidades intelectuales similares a González. Pero en estos momentos no es que haya posverdad, es que directamente las huestes sanchistas viven en la mentira. Una mentira deificada a verdad por los sucesos del 1 de octubre y la aberrante abstención del PSOE.


Si existe esa mitificación o totemización de Sánchez ¿por qué mantengo que será aniquilado por sus propias huestes? Dos son los factores que he podido observar. El propio movimiento de las bases socialistas y la actuación del propio Sánchez frente a ellas. Pedro Sánchez no crea ni apoya el movimiento del No es No. Surge de las propias bases socialistas no por Sánchez sino por dar el gobierno al PP. Para un socialista español existe un límite ético y político que marca una línea roja. Dar el gobierno al PP, y más a este partido conservador corrupto y dictatorial (como se demuestra en el control de todas las estructuras del Estado), es algo que no es cabe en la cabeza de ningún socialista de base. Tampoco lo fue para quienes lo propugnaban pero se movían en la razón instrumental, no en el plano emotivo.

A ese movimiento que hacía florecer la lucha de las bases socialistas se fueron acoplando personas de muy diversa procedencia dentro del partido. Los diputados del No eran reclamados por todo el país para que diesen charlas, el movimiento recogía firmas (que cayeron en manos del oscuro aparato de Sánchez), se presentaban denuncias, incluso los trotskistas aparecían con su entrismo en escena. Sánchez había renunciado, dejando tirados a sus compañeros y compañeras de hemiciclo, y llorado sus penas en televisión. Había abandonado el barco junto a las ratas (los que pasaron de apoyar el No a la abstención por salvar las hipotecas). Pero mandó a sus personas de confianza, a sus nuevas personas de confianza habría que decir porque cambia de equipo como de calzoncillos, para mover ese movimiento espontáneo a su completo favor y que le acabasen reclamando con adoración.

Es en ese momento cuando comienza la perversión del movimiento de lucha espontánea que había surgido. Poco a poco las personas que encabezaron las plataformas de toda España son sustituidas por el aparato de Sánchez en cada provincia. Aparato compuesto de neófitos del sanchismo, de correveidiles y algunos amargados y amargadas. Personas que se partieron la cara en el propio hemiciclo, como Susana Sumelzo, es dejada a su suerte frente a Lambán, en favor de algunos abstencionistas porque Sánchez sí paga traidores. Todo aquel que le aporte, en estos momentos, algo de brillo y sometimiento a su voluntad es bienvenido. Las plataformas del No es No han acabado desapareciendo en favor de la organización de una facción sanchista dentro del partido.

Incluso en el plano ideológico y organizativo Sánchez ha colocado a sus amigos. Salvo Odón Elorza, ninguno de los que estuvieron presentes el día de la presentación de su documento en Madrid se había partido la cara en los meses anteriores. No se puede dudar del voluntarismo de Tezanos o Escudero, para ellos es casi un honor que los vuelvan a llamar, pero el resto de los participantes en aquello son tan aparato como las huestes de los barones. O desean volver al aparato. ¿Qué dice democrático el documento? Que se consultará a las bases decisiones fundamentales y que se quiere elegir por listas abiertas a los miembros del Comité Federal. No veo mucha democracia. No veo que el demos socialista se acerque al cratos. Es más, todo ello supone la instauración de un sistema bonapartista y plebiscitario donde todos los mecanismos intermedios de control quedan completamente anulados. Vamos lo que pretende hacer Maduro en Venezuela y que tan poco gusta a Sánchez.

Ya se puede observar que Sánchez tiene poco apego a la democracia. Ya dijeron sus abogados que las primarias eran para tener entretenidas a las bases. Pues ahora tendrán plebiscitos donde él preguntará lo que quiera y de la forma que quiera y las bases se limitarán a votar. Ni más, ni menos. Tragarán las bases, como ya tragaron y eso que se reclaman de izquierdas, con acuerdos con Ciudadanos que serán completamente de derechas. O aceptarán coaliciones con Podemos donde el PSOE será solamente un comodín de maquillaje del líder morado con Sánchez llevado a muchos actos para dorarle la píldora. Mientras el ego de Sánchez esté lleno, le importa la democracia y el PSOE muy poco. Y de esto ya hay mucha gente de las bases y del movimiento democrático del PSOE que se están dando cuenta.

Cree Sánchez que ha logrado un nivel carismático como el de González, Comienza a verse intocable y se lo cree. Comienza a parecer mucho más Calígula que César. Pero el equivocado es él. No a mucho tardar las bases igual que se han levantado contra las baronías, de las que dependen monetariamente en muchas ocasiones, se levantarán contra la mentira democrática que es Sánchez. Ya tiene montado su aparato frente a las bases. De momento muchas personas siguen creyendo en él, pero otras muchas ya se han dado cuenta cómo es. Muchos de los que le apoyan son conscientes de que Sánchez es un medio, no el fin. Él, evidentemente, no lo ha entendido. Y muchas personas de las bases saben que algún día tendrán que acuchillarle políticamente. De momento les sirve en la consecución de un PSOE de izquierdas y democráticos, aunque saben que Sánchez ni es democrático (ya lo demostró durante su mandato), y es un liberal humanista. Saben que lo tendrán que matar simbólicamente, y saben que no dudarán ni un minuto en hacerlo. Eso sí, igual en todo este juego de máscaras, espejos y medias verdades se llevan al PSOE por delante dando un gusto enorme a PP y Podemos. Es el riesgo que asumieron las bases al sublevarse y apoyarse en Sánchez. Si lo hubiesen hecho en otros igual…

domingo, 5 de marzo de 2017

La metedura de pata de Susana Díaz


Había manifestado que las personas quieren que vuelva el PSOE, que sepa de dónde viene, a dónde va y qué es lo que quiere para España y Andalucía. Iba subiendo el calor, que no el rigor, del discurso de la dirigente socialista. En un momento dado (ver vídeo), enfervorecida recordó que el PSOE de antes era un PSOE en el “que cabía desde Paco Vázquez a Pablo Castellano”. Los investigadores de la historia del PSOE dieron un respingo y cayeron en la cuenta del patinazo de Susana Díaz.



Sin duda Pablo Castellano fue un dirigente socialista, divergente con las tesis del felipismo, y fundador de Izquierda Socialista, que convivió con González y Guerra, hasta que lo expulsaron en 1987. Había criticado la política de reconversión industrial y poco socialdemócrata de Boyer y Solchaga, había defendido el No a la OTAN en el 30 Congreso del PSOE y durante la campaña del referéndum, o criticaba la falta de democracia interna dentro de la organización.
Sin embargo, no fue hasta que denunció un posible caso de tráfico de influencias de Txiqui Benegas y Abel Matutes (sí, el que fuera ministro del PP) cuando se le expulsó sin tramitación de expediente el 20 de octubre de 1987. Por tanto, parece que no cabía Castellano en el PSOE. ¿Este es el PSOE que quiere Susana Díaz?

Pepote Rodríguez de la Borbolla defenestrado

José “Pepote” Rodríguez de la Borbolla, al que Díaz debe conocer muy bien, fue otro de los políticos defenestrados en su momento por ir por libre. Y eso que era el presidente de la Junta de Andalucía. Pepote fue, primero, desplazado de la secretaría general del PSOE-A mediante distintas maniobras de Alfonso Guerra, que puso a Carlos Sanjuán. Y, segundo, le quitaron de la Junta de Andalucía nombrando a Manuel Chaves para relevarle. El escándalo, por enfrentarse a Guerra, provocó la reunión del clan de Chamartín que dio origen a lo que luego se llamaría renovación.
Es conocida la anécdota que tuvo con Guerra. Pepote preguntó a Alfonso qué había que hacer para estar bien con él. El vicesecretario le contestó que había que situarse en la línea. Pepote inquirió de nuevo “¿Dónde está la línea?”. A lo que Guerra contestó: “La línea se mueve”. De esta forma Guerra situaba la capacidad de estar en el PSOE a su propia voluntad y deseos. A lo que quisiese la Ejecutiva Federal. ¿Este es el PSOE que desea recuperar Susana Díaz?

Otros casos a los que no dejaron vivir el PSOE

En otra parte del discurso del sábado 4 de marzo, Díaz destacó que antes en el PSOE “cabían hombres y mujeres que vivían el socialismo como les daba la gana, como querían”. Cierto, el PSOE siempre ha sido muy ácrata y, paradójicamente, muy disciplinado a la vez. Cada cual ha intentado vivir como quería el partido. Pero se podía vivir en el fondo del partido. En cuanto se ha sacado la cabeza se la han cortado.

Alonso Puerta tuvo la ocurrencia de, siendo él secretario general de Madrid, encabezar la delegación al Congreso Extraordinario de 1979. ¡Por delante de Felipe González! Éste era simplemente militante al haber renunciado. Se la guardaron y cuando denunció un posible caso de corrupción en las contratas de la basura en el Ayuntamiento de Madrid fue expulsado del PSOE. En 1981, dos años después de la ofensa, dejó de pertenecer al partido por denunciar un caso de corrupción.

José Antonio Pérez Tapias y Juan Antonio Barrio, ambos de Izquierda Socialista, fueron laminados de las listas electorales de 2012 por haber tenido la osadía de votar contra la reforma del art. 135 de la Constitución. La famosa votación donde España perdía su soberanía económica en favor de los intereses económicos europeos. Y el caso es que en Granada se solicitó que el profesor Pérez Tapias siguiese. Pero no lo aceptó el aparato. ¿Este es el PSOE que quiere Susana Díaz?

El PSC tendrá que realizar una inscripción entre sus afiliados para poder participar en las primarias del PSOE. Esto ha sido llevado a cabo por la actual Gestora del PSOE. Hasta la fecha, la militancia del PSC siempre ha podido participar en los congresos y primarias del PSOE con total libertad y en virtud al pacto que se cerró hace más de treinta años. Sin embargo, ha sido la Gestora la que ha roto relaciones con los catalanes por no seguir el voto abstencionista del Comité Federal. Por no plegarse a la voluntad de unos pocos. Al igual que sucedió con Castellano, Rodríguez de la Borbolla, Puerta o Pérez Tapias, ahora es el PSC el que no puede vivir el PSOE como le da la gana. ¿Es este el PSOE que quiere Susana Díaz?

martes, 7 de febrero de 2017

¿CANDIDATOS? LOS ESTATUTOS, LO IMPORTANTE SON LOS ESTATUTOS



En estas fechas la militancia socialista se encuentra dividida entre candidaturas y la Ponencia Política que elabora la cleptocracia de Ferraz. Nada de eso importa realmente. Da igual relativamente. La batalla que deberían estar preparando todos esos militantes indignados se encuentra en los estatutos del partido. Ahí está la clave. Alfonso Guerra ganó la batalla del 28° Congreso cambiando los estatutos mientras los puristas se afanaban en defender los postulados marxistas. Todos alelados en la superestructura cuando se la jugaban a nivel estructural. Demostraron ser malos marxistas porque, según Marx, la estructura es la que determina la superestructura. ¡Ahora vais y lo cascáis!

Importancia de los candidatos

Votar a Patxi López, a Susana Díaz (que sigue escondida y nadie sabe si saldrá), a Pedro Sánchez o a Ignacio Urquizu (¿quién le ha dicho a este chico que sirve para algo más que la sociología?) es indiferente en sí mismo. 

Patxi López lleva ya dos pactos con el PP, en Euskadi y en Madrid. Y lo peor es que sigue aceptando los pactos, así sean más o menos beneficiosos (que algunos como los de la pobreza energética son para darles de gorrazos). Por mucho que él hable de una izquierda radical, no tiene visos de ser más que una rememoración de la socialdemocracia caduca y pactista del finales del siglo XX.

Susana Díaz. Habría que preguntarse si esta mujer es realmente de izquierdas o sólo es nacionalista española y andaluza. Reúne en sí misma todo lo malo del clientelismo político, exacerbado en Andalucía; lo malo de la oligarquía dominante de los aparato de partido; y lo peor de los niños y niñas criados en las Juventudes Socialistas y que no tienen mayor visión política que el partido, las elecciones y el manual de estilo.

Pedro Sánchez. ¿Qué decir de Sánchez? De izquierdas no es. ¡Oh sorpresa! Y lo demuestra su rapidez en llegar a un acuerdo con el PP naranja, esa secta llamada Ciudadanos, antes que intentar un giro a la izquierda. Sólo, y remarco ese sólo, se atrevió a dar el paso de contactar con los partidos de izquierdas del Parlamento en las segundas elecciones y como forma de salvarse él personalmente. Su único mérito es que se mantuvo firme en el No es No a la derecha española, la primera y la segunda vez. Eso le salva en parte y le sitúa en el favor de los militantes. Pero, sólo sería aceptable, rodeado de personas de claro compromiso con la izquierda. Nada de perfileros que ahora hay muuuuchos en el PSOE.

Importancia de la Ponencia Política

En la Ponencia Política del PSOE, además de el resumen de lo que han hecho (mal) y lo que pretenden que se haga (políticas públicas, al fin y al cabo) queda un espacio para los valores del partido. El ser de la organización queda ahí reflejado mediante un discurso ideológico (siendo optimistas) que dan la sustancia a las políticas a realizar. ¿Alguien se ha parado a pensar que eso se cumple? Sucede como lo que ha pasado con Ciudadanos, han cambiado a ser un partido liberal, y a nadie le ha importado porque sus actos ya demostraban que lo eran. Por eso, los militantes en lucha han de pasar de pelear en esta sección. ¡Como si prometen llevar a cabo la revolución de los soviets! Es todo mentira.

Leo y escucho a muchos militantes que hablan con indignación sobre la necesidad de posicionar al PSOE a la izquierda de una vez por todas. Estoy de acuerdo, pero batallar sólo en ese espacio y dejarse llevar por lo que digan los candidatos al respecto es un error. ¡Un grave error! Que la gestora desea que el PSOE sea un partido socialdemócrata, ecologista, feminista y más ismos colocados uno detrás de otro sin verificación? Que lo pongan. Pero lo importante no son los valores escritos en un papel, sino los valores que se demuestren en el día a día. Frente a hechos contingentes el valor se encuentra en las personas que sacan adelante el proyecto. Por lo que mantener una oligarquía del no-trabajo civil es contraproducente.

Los estatutos, la clave

La batalla de las plataformas de militantes y de los movimientos críticos debe centrarse en los estatutos. La defensa de una profundización democrática sólo está en esa parte de la lucha. Las demás batallas serían un desgaste para Guerra que se está librando.

Mi consejo es que desde el minuto uno las plataformas de militantes indignados, apoyen a Pedro Sánchez o a Perico el de los palotes, es que obtengan cuantos más delegados y delegadas mejor en todos los procesos congresuales. Desde la Asamblea local al Congreso Regional, pasando por los provinciales. ¡Dejaros de negociaciones cursis y oligárquicas! Si tenéis el 30% de los votos a presentar lista alternativa siempre. Esos ya no os los podrán quitar.

Desde la solidaridad de clase os ofrezco unos cambios que deberían ser fijos en la lucha por los estatutos:

Primarias a dos vueltas y sin avales

Limitación de mandatos en todas las estructuras del partido

Consulta de las decisiones estratégicas a la militancia

Cambio en la elección a nivel local de las listas de concejales. Volviendo a la posibilidad de listas alternativas y votación de las mismas.

El Comité Ejecutivo Federal debería estar formado por la Ejecutiva Federal, los Secretarios Generales de Federaciones, cinco miembros elegidos en los congresos regionales y el resto de miembros elegidos mediante sorteo entre toda la militancia y proporcional al número de militantes de esa región. Se acabaron las delegaciones de mantenidos y prebendados. (Lo mismo se haría a nivel regional y provincial)

Rotación de género. Para los cargos de las diferentes ejecutivas debería existir una rotación de género. Que no siempre un hombre tenga que ser secretario de organización o de relaciones institucionales o portavoz. Cada ocho años deberá cambiar el género de las personas que ocupen los cargos.

Las delegadas y delegados a los Congresos Federales se deberán elegir directamente desde los Congresos Provinciales o Regionales en las regiones uniprovinciales. Dejando un 10% de los mismos a las votaciones en las agrupaciones locales.

Ampliar el Congreso Federal de 850 delegados a 3.000 para que haya posibilidad de que acudan personas no vinculadas a los cargos públicos.

Supongo que habrá muchas más propuestas de ampliación de la democracia, pero éstas las considero mínimas para decir que el PSOE posee una democracia interna decente.

jueves, 5 de enero de 2017

TENEMOS UNA IZQUIERDA QUE NO NOS MERECEMOS



Tenemos una izquierda en España que realmente parece cualquier cosa menos una izquierda. Dando por amortizada a Izquierda Unida, pues así lo quieren sus máximos dirigentes, nos quedan dos partidos que sen encuentran divididos. Para mal o para peor no parece que las soluciones que se aporten en los próximos congresos vayan a mejorar la situación actual. Como máximo tendremos dos partidos con una oligarquía al mando pero ¿con una clara visión ideológica del futuro?

PSOE

El histórico partido socialista se debate en estos momentos entre, al menos, dos posibilidades. Dar continuidad a las políticas de la Gestora y de la Gran Coalición mediante el ascenso al poder de Susana Díaz (o persona interpuesta), o volver a las políticas de nosesabequé de Pedro Sánchez. Y una tercera vía, con Rubalcaba, en la sombra supone seguir en la misma senda.

Susana Díaz encarna lo peor que ha ido gestando el socialismo patrio durante años. Capacidad intelectual bajo cero, gestión para mantenerse en el poder y una ideología trufada de lugares comunes de lz nueva izquierda que fracasó a principios de siglo. O de buenismo si lo prefieren. Pedro Sánchez es lo mismo. No se equivoquen. ¿Cuál es la diferencia? Ninguna. Salvo que en el caso de Sánchez se ha apuntado al carro de la democracia interna en el PSOE. Ni una ni otro tienen proyecto futuro tanto de gestión como ideológico. Dudo que sepan como está configurado el sistema social en la actualidad. Así que para pedirles opinión sobre el futuro, aunque sean deseos, mejor esperamos a otros.

La desgracia del PSOE es que se enfrenta a la aniquilación por dejación de funciones (lo que representaría Díaz) o al encumbramiento al Olimpo socialista de una persona totalmente incapaz, Sánchez. A Díaz le pueden haber tocado los dioses del socialismo, pero a Sánchez le debieron tocar los astros de la negligencia. Se quejan los seguidores de Sánchez que la Gestora está purgando. Pues en la misma forma en que lo hizo el "niño bien". O ¿es que llevarse por delante las federaciones madrileña y gallega no es purgar?. Ninguno de los dos plausibles candidatos son de fiar. Carecen de ideología más allá del mantra de partido y en lo orgánico la democracia es algo que les provoca urticaria.

Algo bueno sí ha ocurrido en los últimos tiempos dentro del PSOE. La Gestora con sus desfachateces ha conseguido transformar a muchos afiliados en militantes. El afiliado es esa persona que acude a reuniones para escuchar, vota lo que le dice su cacique de turno y apoya al partido en la campañas electorales. El militante pelea y habla dentro de la organización, toma posición más ideológica u orgánica, se deja comprar más fácilmente (no quiero obviar lo negativo), pero reclama democracia y compromiso. Ahora en el PSOE existen más militantes y eso supone una inyección de energía positiva en la organización. El proceso dialéctico de situar al PSOE en posiciones de rendirse con total evidencia al bloque en el poder, ha generado su antítesis en la formación de un cuerpo de rebeldes.

El PSOE debería abandonar las chorradas de la Nueva Izquierda, del buenismo, de la moral cristiana que pueblan su actual ideología y pasar a analizar con rigor el sistema. Sigue anclado en un discurso que pertenece a un tiempo que ya pasó. No hay pacto por el bienestar desde hace 30 años como poco, pero se sigue hablando como si la lucha fuese sólo el Estado de Bienestar. ¡No! No quiero un Estado benefactor que sea mal gestionado en favor de unos cuantos amigotes. Así sean de izquierdas o de derechas. El PSOE debe ser consciente de que o se está con el bloque en el poder (como lleva desde 1982) o se está con la ciudadanía. Aquí tampoco se puede estar en misa y repicando. No valen parches liberales para tapar los errores sistémicos. Sino la transformación del propio sistema. Y para eso hace falta entenderlo. Algo que hace muchos años que el PSOE no hace con pensamiento transformador aunque sí con maneras acomodaticias. 

Lo ideal sería la presencia de una tercera vía completamente de izquierdas. No García Page no es de izquierdas y Patxi López se parece más a un cura de pueblo. Pero esa tercera vía, que en tiempos pretéritos encarnaba Pérez Tapias, ya no es posible porque la militancia está al puro juego del poder, de la guerra cainita, de la venganza o de la rendición a los poderes fácticos con todo el arsenal. Así que casi mejor que se disolviese y aquí paz y después gloria.

PODEMOS

La situación en el partido morado, no siendo halagüeña, es un pelín mejor que la del partido socialista. Al menos tienen un debate de estrategia política con algún toque ideológico. La división, empero, es bastante más profunda que la del PSOE. Existen tres facciones claramente definidas que van de arriba a abajo en la propia organización. Si pudiesen solventar de manera democrática la existencia y convivencia de las tres facciones tendrían mucho ganado. Pero el carácter leninista del amado líder creo que impedirá ese proceso. Pablo Iglesias está tan pagado de sí mismo que no puede abrirse al pluralismo y a otra cosa que no sea él y su circunstancia. Entiende que el partido es lo que él entiende que es. Esto es, su voluntad y su táctica son las mejores porque son suyas.

El artículo de Monedero diciendo que sin Pablo Iglesias Podemos desaparecería (y os jodéis), es el claro ejemplo de entronización y divinización de una persona en el poder. Querer establecer una capacidad carismática en Iglesias, como se hacía con los reyes medievales, supone que el partido perderá toda capacidad de autoanálisis y de crítica. Ya se ha visto en los últimos procesos regionales como los pablista han ido laminando a los errejonistas con el consentimiento de los anticapitalistas, que se han beneficiado de ello. Idolatrar a Iglesias supone a medio plazo matar el proyecto. Solo hay que mirar lo que ha venido pasando en el PSOE para darse cuenta.

En el debate estratégico las posiciones son más calle y volver a representar al proletariado, que es la opinión de Iglesias, y más diálogo y transformación de la sociedad que es la posición de Errejón. Anticapitalistas están en el viejo estructuralismo leninista y casi no cuentan en esto. La posición de Iglesias puede tener réditos a corto plazo y dar muchas portadas y programas de televisión, pero yerra por dos motivos fundamentales. Primero, la política hecha con las tripas sirve para períodos cortos de movilización pero no para gestionar o crear leyes. Y mientras estemos en un sistema democrático-liberal ese factor es determinante. Y, segundo, porque el sujeto de acción colectiva al que se refiere Iglesias prácticamente no existe. El debate sobre la clase en sí o para sí fue eterno y erróneo y parece que Iglesias persiste en el error. Los factores de producción generan la pertenencia de clase sí, pero si ya no existen los factores que generaban el proletariado (al menos en gran parte de las sociedades occidentales), a poco proletario puedes defender. Además, la determinación de clase tiene un componente supraestructural que los pablistas desestiman.

Creo que la posición de Errejón, que no es completamente incompatible con ciertas dosis de tripas, es mucho más acertada. Para conquistar el poder hay que trabajar con ciertos parámetros supraestructurales o mentales, si se prefiere, que no son incompatibles en sí, pero que sí deben armonizarse. Ganar el pueblo, como reto populista, exige un proceso de transformación societal que necesita de pactos y acuerdos por el camino. Querer que las personas piensen y actúen en el modo correcto para poder transformar el sistema no se consigue con gritos, sino con leyes, republicanismo y mucha pedagogía. Esto Iglesias no lo entiende, pero los errejonistas sí. Por eso sus intentos de pluralizar Podemos, de volver a los círculos, de hacer pueblo. El inconveniente de esta propuesta es que el hambre se pasa hoy, que las mujeres son asesinadas hoy, que el sistema responde. En otras palabras, el tiempo juega en su contra.

Estamos, como se ve, ante un panorama en la izquierda donde los más atractivos (PSOE) son incapaces analizar y ser algo más que un mero apéndice del bloque en el poder. Y los que analizan mejor (PODEMOS) son incapaces de tener una estrategia adecuada.